Pues desde hace un mes más o menos he pasado de ecualizar con el portátil + tarjeta externa usando Foobar y el plugin EasyQ para aplicar EQ paramétrica, a usar el móvil como fuente a través del bluetooth. Ecualizo con un simple EQ gráfico de 10 bandas (aunque hay apps para móvil con posibilidades de ecualización más potentes, incluso en paramétrico).
A los equipos (lo incorporé a los dos que uso) les añadí un receptor bluetooth 4.1 EDR con AVRCP1.4 y A2DP1.2 :
Receptor de audio Bluetooth Ugreen Wireless Bluetooth 4.1 Receiver (ref. 30444) Review
En el móvil uso PowerAMP con la música comprimida en ogg q6 (equivalente a unos 224kbps variables en MP3), en lugar de los FLAC que usaba en el portátil.
Pues que estoy ENCANTADO! El móvil me permite acceder a la música al instante, me olvido de encender el portátil, me olvido de cables, y de discos duros. Actualmente llevo una microSD de 256GB, pero en poco tiempo me pasaré a la de 512GB que no tardará en poner a la venta Samsung, y llevar así en el bolsillo los 70 y pico mil temas que conforman mi colección.
Reconozco que la comodidad ha sido el punto determinante para pasarme al bluetooth, pero es que en cuanto a calidad de sonido también estoy encantado. Tengo muy claro que la EQ potente paramétrica ofrece (o puede ofrecer, mejor dicho) mejores resultados, especialmente en la zona baja, pero:
1. Un EQ gráfico de 10 bandas te permite ajustar el sonido a la sala de forma razonablemente satisfactoria, si no eres muy exigente. Hay un mundo entre escuchar un equipo sin ecualizar y escucharlo bien ecualizado con un simple EQ de 10 bandas. El tramo de mejora de ahí a una EQ mucho más potente es claramente más pequeño, aunque evidente.
2. Con ecualizaciones más potentes es más fácil llegar a sobreecualizar, cosa que sospecho que me estaba pasando en alguna frecuencia. Aunque en general he perdido algo de precisión en el sonido final, lo encuentro un punto más agradable y fluido ahora.
Una cosa que he sacado en claro es que todo lo que se toque en la gráfica de respuesta en frecuencia, hay que verificarlo a oido, y en ese sentido me ha resultado mucho más fácil hacerlo con el EQ de 10 bandas, en el que he visto claramente que no siempre que la gráfica queda más plana, suena mejor. Lo mismo se puede aplicar a la EQ potente paramétrica, pero siempre me resultó muy complicado verificar a oido cambios tan sutiles.
No he hecho pruebas rigurosas comparando el sonido a través de los dos medios, pero mi experiencia de disfrute es ahora estupenda, y esta combinación de facilidad de uso + ecualización moderada me ha enganchado totalmente.
Saludos!